Entrevista al Rabino Haim Casas

Esta semana, como noticia en nuestra web, tenemos con nosotros a Haim Casas. Rabino español sefardí y andalusí y además un miembro muy activo y colaborador en ATID.

Nacido en Córdoba, se crió en Cádiz y se enamoró de la vida en Sevilla. Como él bien dice: "He hecho del mundo mi patria y mi matria".

Quién es Haim Casas?

Buena pregunta. Los sabios de la antigua Grecia consideraban el conocimiento de uno mismo como una de las tareas fundamentales de cada ser humano. Sócrates decía que una vida sin reflexión no merecía ser vivida. Creo que aún me queda mucho trabajo interior para poder responderte a esa pregunta con mediana exactitud. Dicen que por las obras se conoce también a las personas. Si a ello nos ceñimos podría decirte que a lo largo de mi (aún corta) vida he tratado de ser honesto conmigo mismo y con los demás, de mostrarme tal y como soy y de hacer aquello que creía era lo correcto. Vivo la vida con la intensidad de ser consciente que cada día es un regalo único e irrepetible. No puedo decirte 100 % quien soy yo pero si te puedo decir una cosa: quiero ser yo. Y a este “yo” que quiero ser aún le falta estudiar más, trabajar más, aprender más de los que le rodean para poder servir con eficacia y humildad al pueblo de Israel. Quizás puedes preguntar a otros quién es Haim Casas, probablemente ellos puedan ayudarte y seguramente cada uno te dirá algo diferente. A mi lo único que me importa es que algún día se me conozca por haber trabajado duro por el futuro de nuestra comunidades en Sefarad.

Hay alguna diferencia entre el Haim de hace 10 años con el Rabino Haim de ahora?

Soy el mismo pero mucho más sereno. La fruta no madura en un cajón entre algodones sino a la intemperie, expuesta a las inclemencias del tiempo. Han sido años tan bellos como difíciles. La dificultad ha atemperado mi carácter y me ha hecho una persona mucho más reflexiva. El trabajo, el estudio, la oración, la experiencia del amor y también del desamor; vivir en distintos países, trabajar para comunidades en Inglaterra, Francia, Suiza, Israel, España y Marruecos… Todo esto me ha transformado, pero en esencia sigo siendo ese joven romántico, idealista y cargado de optimismo que cree firmemente que lo que fue verde reverdecerá y que por lo tanto el futuro de la comunidad judía de España es brillante.

Eres el primer Rabino cordobés después de 500 años, como sienta esto? Ha impactado en tu carrera como rabino? Y en España?

Lo vivo con responsabilidad. Siento el deber de preservar la memoria de nuestros antepasados y el deber de construir hoy una comunidad dinámica que sea fuente de inspiración para las generaciones futuras.

Sabemos que en España no existe todavía ningún seminario rabínico, y sabemos que para muchos españoles el querer estudiar el rabinato implica marcharse fuera de españa, una ardua decisión. Cómo has vivido esta faceta?

Es importante salir fuera y después volver. Todo estudiante rabínico debe vivir su propio Lech Lecha, esto es: Al igual que Abraham avinu, debe dejar su país, su casa, los suyos, para iniciar un viaje desde lo conocido a lo desconocido, desde lo cierto hacia lo incierto. Este viaje nos transforma en lo más profundo de nuestro ser. Nos hace salir de nosotros mismos y mirar al otro y el en otro encontrarse con Dios.

Donde empezó esa vocación por el judaísmo hasta el punto de estudiar el rabinato?

Yo no le llamaría vocación sino necesidad. Todo judío se desarrolla como judío en comunidad y familia. Fue la necesidad de vivir en comunidad en una ciudad como Córdoba donde no había habido una comunidad judía oficial en 500 años, lo que me hizo animar a otros judíos que vivían en la zona a crear Beit Rambam, la primera comunidad judía progresista que se fundó en Andalucía. Posteriormente la sede de la comunidad se trasladó a Sevilla porque es allí donde viven la mayor parte de nuestros socios. El rabinato llegó después y también respondió a una necesidad, la necesidad de mejorar mi educación judía si quería realmente ser útil a los demás. Para mí el rabinato nunca ha sido un fin sino sólo un medio para poder servir más y mejor.

Háblanos de Makom Sefarad, alguna Web? Dónde podemos consultar?

Makom Sefarad es una iniciativa que busca enriquecer nuestra vida judía a través del encuentro con el otro. Este encuentro es facilitado a través de actividades culturales, seminarios y shabatot. El otro puede ser un judío de un origen distinto al nuestro, de otro país, otra cultura o de una afiliación religiosa o ideológica distinta a la nuestra. El otro puede ser también un no judío. Es el encuentro con el otro una oportunidad para realizarnos física y espiritualmente. En Makom Sefarad creemos firmemente que lo que hizo posible la edad de oro del judaísmo en la península fue el encuentro de identidades culturales y religiosas de muy distinto origen. Esta coexistencia en diversidad nunca fue fácil pero nuestros antepasados supieron aprovecharla para el crecimiento como individuos y como comunidad. Hoy día vivimos también en una sociedad de gran pluralidad. Podemos ver esta pluralidad como una amenaza o como una oportunidad para crear un mundo mejor. La historia judía de España puede ser una fuente de inspiración para nosotros hoy. Esta es la web: www.makomsefarad.org

Como ves el Judaísmo en España de aquí a un largo plazo y que es lo que tú puedes aportar?

Lo dije antes, soy profundamente optimista. Creo que la comunidad judía española volverá a ser una fuente de conocimiento e inspiración para el pueblo judío y para la humanidad. Pero para que esto llegue a suceder debemos entender que la tarea es grande y que solos no podemos. Debemos huir de personalismos y egos estériles. Me entristece cuando en España oigo hablar de la comunidad de fulanito o de menganita. Cuando una comunidad tiene nombres y apellidos es muy mala señal. Sólo cuando trabajemos juntos por construir un legado que podamos dejar a las generaciones futuras nuestra labor será fructífera. El yo es y será estéril. Sólo cuando el yo se encuentra con el tú para ser un nosotros la tarea cobra sentido, la cosecha da su fruto. Que planes tienes a corto? Y a largo? Tanto a corto como a largo plazo mi plan es el mismo, continuar aprendiendo de nuestra rica tradición y de todos aquellos que me rodean. Aprender y trabajar…y sembrar para que quienes vengan después puedan cosechar.